La novela de Magdalena Odarda y la Ley de Emprendedores sumó ayer un nuevo capítulo cuando a través de una burda operación de prensa la senadora se inventó el respaldo de la poderosa Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) y terminó siendo desmentida y haciendo el ridículo.
Todo comenzó cuando periodistas de toda la provincia recibimos uno de los habituales comunicados de prensa de la senadora Odarda con el título "La juventud de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa respaldó a la Senadora Odarda", el cual como suele suceder varios medios publicaron sin tocarle ni siquiera una coma (aquí un ejemplo, y aquí otro).
Como parte de este obvio intento de hacer olvidar la tensión existente entre las entidades empresarias y la senadora que inicialmente votó en contra de la Ley de Emprendedores y luego cambió su posición, el aparato de prensa de Odarda se dedicó a viralizar la noticia a través de "memes" que utilizaban el logo de CAME y que incluso la propia legisladora nacional compartió a través de su perfil personal de Facebook.
Tal como se habían propuesto en el bunker de Odarda a la hora de pergeñar este maquiavélico operativo, la noticia se expandió como un reguero de pólvora. Pero hubo un detalle que escapó a la genial mente que planificó la maniobra: para la senadora, en CAME el horno no está para bollos.
Bastaron unos minutos para que ardieran los grupos de WhatsApp que congregan a los jóvenes emprendedores agrupados en CAME, donde desde una y otra punta de la provincia surgían los reclamos porque nadie había consultado nada a la hora de emitir una declaración en nombre de la entidad, tal como quería hacernos creer la oficina de prensa de Odarda. El alboroto, incluso, llegó a oídos del propio Osvaldo Cornide, quien no podía creer que desde la entidad que preside hubiera salido un pronunciamiento de esta índole.
La confusión duró hasta que apareció en escena Fernando Damián Banega, el presidente de la Red de Jóvenes Emprendedores Rionegrinos, a quien el comunicado de Odarda mencionaba junto a Marcos Magnanelli.
Banega primero aclaró ante los otros miembros de la red de emprendedores y luego se abocó a publicar en las redes sociales que de ninguna manera había respaldado -ni en nombre propio ni de la entidad- a la senadora Odarda.
"Quiero dejar claro que bajo ningún punto de vista respaldamos a ningún partido", escribió el joven dirigente empresario, aclarando que -como es sano y lógico- "nosotros defendemos los intereses de nuestros emprendedores". "Un abrazo y agradecemos el apoyo a la Senadora", concluyó, mostrando sus dotes diplomáticas luego de haber dejado en ridículo a la legisladora nacional.
Quizás la senadora hubiera podido evitarse este nuevo papelón apelando a la sinceridad desde un primer momento, pidiendo disculpas por su voto inicial, o incluso atribuyéndolo a una falta de información. Pero eligió profundizar el rumbo, transformándose así en blanco de todas las críticas, incluso las del tenor que hicieron públicas esta semana desde el denominado "Espacio Carrió".
Preocupa tamaña impericia de parte de una representante de la provincia en el Senado y, lo que es peor, no percibimos que la cosa pueda cambiar. Es que, luego de la desmentida por parte de CAME, la única reacción de Odarda y sus seguidores fue cambiar el título de la noticia en las publicaciones en las redes sociales y ocultar la aclaración de Banega. Como si el comunicado nunca hubiese existido, como si nadie lo hubiese publicado, como si no hubiese sido desmentido.
Por suerte, cuando todo falle, Odarda podrá echarle la culpa a los periodistas que la malinterpretan o al entusiasmo de sus militantes.
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